lunes, 16 de octubre de 2017

Ophelia


Los atentos lectores de Astroboy habrán fruncido el ceño cuando, esta mañana, se anunció la llegada del huracán tropical Ophelia a... Irlanda! Sí, chicos, extrañas cosas pasan en el Atlántico Norte en estos meses. ¿Cambio climático? Nada que ver; seguramente el evento obedece a que la Luna se puso esta semana en Sagitario, o a algún tipo de intervención malintencionada de los rusos en el oeste europeo. De paso, el huracán no aportó lluvias sino fuertes vientos secos a la Península Ibérica, motivo por el cual se aceleró la ola de incendios que arrasa dicha región en estos días. De todo esto habla la nota que sigue, de Josep Fita para el diario catalán La Vanguardia


Título: Ophelia, el peor aliado en la lucha contra los fuegos de Portugal y Galicia

Subtítulo: El ciclón tropical, que ya se encuentra sobre Irlanda, ha contribuido al efecto devastador de los incendios

Texto: En Portugal y Galicia viven horas críticas. Sólo en tierras gallegas hay ahora mismo (14:00) un centenar de incendios activos , de los cuales 17 afectan directamente a núcleos urbanos. El fuego ha dejado por el momento cuatro muertos en Galicia y 31 en el país vecino.

Ya de por sí es complicado hacer frente a tal cantidad de incendios; pero si, además, se une a ellos un aliado en forma de huracán, la tarea se complica. Eso es lo que ha pasado en las últimas horas en Galicia, cuando los vientos del huracán Ophelia se han dejado notar.

Y el problema no era sólo el viento, que soplaba a unos 80 km/h, sino su procedencia. “Ophelia impulsaba vientos del sur, lo que ha hecho que la humedad relativa bajara”, explica a La Vanguardia Mònica Usart, meteoróloga de RAC1 y 8tv. Y no sólo eso: “Ese viento cálido hizo que se dispararan las temperaturas, con máximas de entre 30 y 34 grados en un mes de octubre, y todo ello en una época de sequía”, añade.


La tormenta perfecta

O sea, que se ha dado la combinación perfecta para que el fuego encontrara el mejor ecosistema para seguir creciendo: viento fuerte y cálido, temperaturas altas, baja humedad relativa y sequía.

El problema es que Ophelia sólo dejó viento en Galicia, y no lluvia. Y es que la precipitación quedó circunscrita sobre el océano. “Pero las borrascas que se irán desprendiendo de este fenómeno sí acabarán afectando a Galicia”, vaticina Usart. Los mapas indican que para esta noche podrían llegar chubascos generosos en la zona, y que el martes por la tarde habría otro episodio de lluvias.


Un huracán anómalo

Poniendo el acento exclusivamente en el aspecto meteorológico, el huracán Ophelia “será motivo de estudio”, asevera esta meteoróloga. Y es que “un categoría 3 nunca había llegado a esas latitudes”, agrega.

Efectivamente, es extraño que un fenómeno de estas características haya llegado tan al norte. “Que se mantengan las características tropicales a esas latitudes es muy raro, porque el motor de estos fenómenos es el agua, y en esas zonas está más fría”, concluye Usart.

Al final acabará ocurriendo lo que acontece en muchos incendios. Hay un momento en que la meteorología no ayuda (sería el caso de Ophelia), pero luego es la misma meteorología, en forma de lluvia generosa, la que ayuda a sofocar el fuego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario